Es algo que nos gusta como cena, resulta más ligera que con una base de pizza normal y te saca un poco de la monotonía, está más buena tibia que caliente y eso la hace más apetecible con el buen tiempo. También va muy bien como picoteo en reuniones de amigos.
Os voy a decir como me gusta a mi, pero está bueno con casi cualquier cosa.
Ingredientes:
·masa de hojaldre congelada o refrigerada.
·Tomates (yo uso de pera)
·mozzarella
·queso de cabra
·Olivas verdes (a mi me gustan más negras, pero es una cesión a mi costilla)
·aceite de oliva
-> Si habéis elegido la masa de hojaldre congelada, tendréis que dejarla descongelar durante un rato. Yo no pongo a precalentar el horno hasta que no empiezo a montar la pizza.
-> Una vez extendida la masa sobre papel para hornear, la pincho con un tenedor por el centro. Corto un par de tomates en rodajas finas y las coloco sobre la masa. Les pongo unas gotitas de aceite de oliva.
-> Sobre esto pongo la mozzarella, el queso de cabra y las olivas. Y al horno a media altura hasta que veáis que la masa ha subido y está doradita. Yo apago el horno y abro la puerta durante 5 minutos antes de sacarla.
Para mí la forma más cómoda de cortarla es cuando ya se ha enfriado un poco y usando unas tijeras de cocina. Y ya solo queda decir "Buen provecho!". Fácil, rápido y bueno.
Contadme con qué la condimentáis vosotras.
Que buena idea! la probaré!
ResponderEliminarYa me dirás si te gusta, para ahora en verano a mi me resulta más ligera que la masa de pizza tradicional ^_^
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